Pasos en la escalera - Laura Rivas Arranz
En las páginas de este libro vive un personaje que está loco. Cree que está dentro de una novela, que alguien lee todos sus pensamientos y que un escritor planea todo lo que sucede. Su hermano quiere que vaya al psiquiatra, no sabe que su aparentemente perturbada mente tiene razón. Normal, todo es tan real en esta novela que es fácil olvidar que se trata de ficción. A mí también me ha pasado. Ha tenido que venir el personaje loco a recordármelo.
"-Si tú llevaras razón, si todo esto fuera sólo una novela, ¿sería tan terrible?, ¿estarías menos vivo que ahora?, ¿serías menos libre que ahora?"
Portada de Pasos en la escalera |
"A los lados de la carretera los arbustos corrían a casa en dirección opuesta a la del autobús. A bordo se oía un llanto desgarrado.-Vendrás a vernos y nosotros iremos a verte...Se lo prometían los arbustos. Y el resto de lo que decían se perdía bajo aquellos lamentos angustiados que no paraban..."
Yo entro en el edificio con más seguridad que Claudia. Aun así lo hago con sigilo, que no se entere nadie que tengo el poder de leer los pensamientos. Yo sí anhelo tropezarme con vecinos en la escalera, y con otras muchas más cosas. Entre ellas, espero encontrarme con esas frases de palabras que encierran múltiples significados que suele regalarme Laura Rivas Arranz, la autora de esta novela. Mi primera sensación es echarlas de menos (las encontraré, aunque tal vez con menor frecuencia que en su anterior libro y que en la mayoría de sus relatos). Sin embargo mi añoranza se esfuma enseguida, Laura Rivas siempre me lleva a su terreno, a su bosque, y cuando me quiero dar cuenta ya estoy atrapada en el trajín de la escalera y en las vidas de sus habitantes. Me descubro curioseando por la mirilla a ver quién entra y sale, asomándome al patio para identificar al dueño de una voz que ha entrado por la ventana, o acechando en el portal esperando el regreso de algún inquilino ausente.
"Ella se hizo con el paquete, firmó el papel, le metió en los ojos su mirada triste y le musitó un "Gracias". Y antes de cerrar la puerta se puso pálida. Sí, estaba seguro. La casa entera empalideció con ella. Y la calle. Y toda la ciudad. Todo era pálido ahora... Y a él el corazón se le revolvió de miedo..."
365.32 - Television. Fotografía de Sarah Reid |
En el edificio vive una anciana terca y egoísta que empieza a olvidar la vida que tuvo y a inventar recuerdos de la que quiso tener; vive un matrimonio que calla cuando tiene que hablar y grita cuando tiene que callar; viven unos niños en cuya lógica aplastante no hay cabida para el absurdo mundo adulto y que aprenden a maquillar sus vidas para estar a la altura de lo que ese mundo exige de ellos; vive un hombre joven volcado en su trabajo y empeñado en llenar de obligaciones su tiempo libre para no pensar en quien debería olvidar; vive una chica que se siente menospreciada y combate su frustración alternando la envidia con la culpabilidad que esta le provoca; vive un joven que intenta vivir de un sueño mientras la realidad amenza con engullirle al sueño y a él; vive alguien cuya tristeza le empuja a volar libre al encuentro del duro asfalto; ... El edificio está habitado por solitarios, tanto los que viven solos como los que lo hacen acompañados. Se ven todos los días pero no se conocen. Y pienso esperanzada que algunos de ellos se caerían bien y se comprenderían, pero están demasiado ocupados para descubrirlo. Ocupados llenando de ruidos su silencios para así no tener que oírse a ellos mismos.
"Otra vez pensó que a su alrededor había demasiado silencio. Podía oírse comer. Y en aquel piso -había necesitado sólo un día para averiguarlo- comer sonaba mal. El golpeteo de los cubiertos sobre el plato, el chirrido del agua al caer al interior del vaso y el crujido del pan al clavarle el cuchillo la deprimían. Alcanzó el mando a distancia y puso en marcha la televisión."
Llaves. Fotografía de alfonsobenayas |
Su talento está en mirar donde nadie más lo hace, o donde nadie más se atreve a hacerlo. Está en la fuerza de sus personajes, por reales, por cotidianos. No siempre nos gusta reconocernos en los demás, pero Laura Rivas tiene el don de presentárnoslos sin artificios, con la guardia baja, y con ello nos redime, porque al vernos reflejados en ellos comprobamos que no estamos solos y hallamos la compresión que buscamos. Y nos concede también el lugar que merecemos, el de protagonistas de nuestra propia historia. Esa historia que pensamos que a nadie más interesa pero que ella rescata para mostrarnos que todos tenemos algo digno de contar. Laura es maga. Toca lo invisible con su pluma mágica y lo hace aparecer. Ese es su poder.
"Mientras las voces sin significado le retumbaban en los oídos, repasó las que había escuchado por el patio: "observando mi vida". Y pensó que en su vida no había nada que mirar, que su vida no era observable y que sus padres, de vez en cuando, la miraban..."
Desde la azotea del edificio por la noche se ve la luna. Si sabes mirar puedes distinguir sus accidentes geográficos. Algunos de ellos se llaman mares y tienen nombres tan significativos como el Mar de las Crisis, los mares de la Tranquilidad y Serenidad, el Mar de las Lluvias o el de las Nubes. Me lo ha contado el hermano del vecino loco, el que quería llevarlo al psiquiatra. ¿Será verdad que la Luna influye en nuestro estado de ánimo? Me dan ganas de salir de casa al descansillo, no al de la novela sino al del edificio en el que vivo; eludir el ascensor y bajar por la escalera saltando de escalón en escalón (yo, que soy un poco Claudia y no me gusta que se oigan mis pasos); aporrear las puertas y torturar los timbres; y gritar a mis vecinos que salgan a contemplar la luna. Pero no lo hago. Pensarían que estoy loca. ¿Y qué más da que lo piensen? Total, ellos no saben quién soy yo. Yo tampoco sé quiénes son ellos.
"Ya no había gritos; el patio estaba en silencio... Su hermano había salido. Estaba solo... En realidad siempre se está solo..."
Título: Pasos en la escalera
Autor: Laura Rivas Arranz
Editorial: Literanda
Año de publicación: 2015
Nº de páginas: 196
Nº de páginas: 196
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Más sobre Laura Rivas Arranz
La anterior novela de Laura Rivas, "Rompecabezas", también está disponible en la web de Literanda y además es gratuita.
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Os invito también a descubrir sus cuentos y relatos en su blog Desde el bosque.
Hola preciosa!
ResponderEliminarNo he leído nada de este autor, quizá más adelante lo haga, pero por el momento lo dejo pasar, tengo bastantes pendientes que me atraen más. Feliz fin de semana. Besotes
Ay, esas listas de pendientes interminables...
EliminarFeliz finde, Violeta.
Besos!!
Pero interminable jajaja ya mismo necesitare otra libreta jajaja. Feliz comienzo de semana. Besotes
EliminarHace tiempo que la voy viendo por el face, y por lo que nos cuentas, es una novela que me llama la atención. Me gustan estas historias de escaleras :)
ResponderEliminarBesos!
Pues anímate a entrar en el edificio y así nos cuentas ;)
EliminarBesos!!
No conocía a la autora ni tampoco el libro pero esta vez no me atrae demasiado lo que nos has contado
ResponderEliminarBesos
Otra vez será entonces, Tatty.
EliminarBesos!!
Me atrae porque me encantan las novelas con personajes que son muy humanos y reales. Me la llevo apuntada. Venir aquí es ampliar la lista.
ResponderEliminarBesos!
Pues si te gustan los personajes humanos y reales sin duda en este libro los vas a encontrar. Espero que te guste. Ya me contarás.
EliminarBesos!!
La conozco gracias a las redes sociales. Me ha gustado tu reseña
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado. Espero que te animes a leer el libro.
EliminarBesos!!
¡Hola!
ResponderEliminarMe ha gustado la idea de esta novela y lo que cuentas de ella, sobre todo lo que dices sobre los personajes. Me leeré la muestra gratuita a ver si me convence.
Nos leemos^^
Espero que te gusten las primeras páginas y te animes a seguir leyendo.
EliminarBesos!!
La verdad es que tiene pintaza, me lo apunto. Aunque eso sí, la portada me parece escandalosamente similar a La casa de hojas.
ResponderEliminarUn besito!
Supongo que es una mera coincidencia esa forma espiral que tienen las dos portadas. No veo más similitud entre ambas. Te cuento además que la editorial Literanda ha tomado una fotografía de Marcus Pink para realizar la portada de "Pasos en la escalera". Vamos, que no se ha basado en portadas de otras novelas, si es eso lo que insinuas.
EliminarEspero que puedas darle una oprtunidad y que nos lo cuentes.
Besos!!
A pesar de los pequeños detalles que le sobran me gusta lo que cuentas y me lo llevo¡¡ espero poder darle una oportunidad¡¡ ya te contaré¡¡ besos¡¡¡
ResponderEliminarA pesar de esos pequeños detalles, sí creo que merece la pena leer esta novela, así que me alegra que pienses darle una oportunidad.
EliminarBesos!!
Pues esta vez no lo conocía, pero parece una lectura muy adecuada para las fechas. Entretenida como mínimo. Me lo llevo
ResponderEliminarBesos
Entretenida como mínimo. Te van a enganchar los vecinos del edificio. Y seguro que algo más que entretenimiento sacarás de esta novela.
EliminarMe alegra ser yo esta vez quien te acerca una lectura.
Besos!!
Me llama mucho la atención y el precio de la edición digital es irresistible... seguro que cae. Un beso.
ResponderEliminarEl precio es un regalo. Espero que la disfrutes.
EliminarBesos!!
Lorena, aunque ya te haya dicho cómo me encanta tu reseña quiero dejarte un comentario también aquí. Gracias!!! :)
ResponderEliminarTu lectura de “Pasos en la escalera” me ilusiona y me impresiona. Tu visión del sótano como “oscuro y germen de todos los males del viejo inmueble”. Y de la azotea como “cargada de promesas” pero con “el vértigo que implica mirar desde ella·. Es precioso. Leyéndote me he dado cuenta de una cosa. Acabo de descubrir que hay sólo un personaje de la novela, uno solo, que se atreve a adentrarse en los dos espacios que citas, la oscuridad del sótano y lo alto de la azotea. Y es un niño. Aunque claro, es un niño batman y a fin de cuentas a Batman los superpoderes para hundirse, tocar fondo y subir de nuevo se le suponen. Pero es curioso y me sorprende que el único que se haya atrevido con los dos espacios sea mi niño batman. Quería contártelo porque lo he descubierto leyéndote a ti.
No sé cómo darte las gracias por nombrarme maga y por esa magia que me concedes en tu reseña. Gracias Lorena. Tu lectura y tus palabras son lo que hacen magia.
Yo sí creo que la luna influye en nuestro estado de ánimo. Esa luna llena de mares que sale cada noche a tentarnos, a hacer lunáticos. Y mira, yo que también soy un poco Claudia, me apunto a ese final lunático de tu reseña que me encanta, qué final más bonito has hecho! Me apunto a “aporrear las puertas y torturar los timbres; y gritar a mis vecinos que salgan a contemplar la luna”. Porque tienes razón, qué más da lo que piensen: “ellos no saben quién soy yo. Yo tampoco sé quiénes son ellos. “
Gracias por esta reseña maravillosa. Por leer la novela y enseñar a tus lectores con tu magia mi edificio por dentro. ¡Un besazo, Lorena!
Me ilusionan los comentarios que he leído interesados por “Pasos en la escalera”. Los que al final os animéis a leer la novela, espero que la disfrutéis. ¡Gracias!
La verdad que lo del sótano y la azotea se me ocurrió mientras escribía la reseña. A veces me salen ideas que ni yo misma sé que tengo.
EliminarCreo que es tu punto fuerte volcarte en esos recovecos íntimos que todos escondemos, mostrar la fragilidad de tus personajes y sacar a la luz esos pensamientos (y sentimientos) que nadie se atreve a verbalizar; centrarte también en problemas cotidianos que cualquiera puede tener y mostrarlos de manera natural y sencilla. Es el denominador común que encuentro en todo lo que he leído tuyo y creo que es lo que hace que los lectores conecten con lo que escribes.
Me alegra que te haya gustado el final. A veces hace falta meter ruido y gritar, sino los silencios matan. No sé si la luna nos influye o no, pero si sé que en la vida todo viene y va, como las fases de la luna. Los malos momentos también. Y tal vez viendo lo diminutos que somos en comparación con ella nos sea más fácil relativizar nuestros problemas. Y contemplándola juntos seguro nos sentimos todos uno aunque sólo sea por un instante.
Gracias por tu reseña de mi reseña. Y que sepas que yo también admito que me señalen esas cosillas que sobran o faltan ;)
Besos!!
Hola! No conocía el libro, pero me ha llamado mucho la atención y el precio en digital es un regalo, así que seguro que le doy una oportunidad.
ResponderEliminarFormo parte de la iniciativa blog asociados y ya te sigo. Besos!!
El libro está muy bien y por ese precio muchísimo mejor. No lo dejes pasar.
EliminarBienvenida :)