La cena (Herman Koch)
Os propongo un vuelo, pajaritos, pero antes de que despleguéis vuestras alas quisiera haceros una advertencia. No es este un viaje fácil y ni siquiera nos lleva a un destino feliz. Podría exhortaros a que os vacunaseis contra las enfermedades que sufriréis en el camino como si de unas vacaciones a un país exótico se tratara, pero ni estamos en tiempo de recreo ni vamos hacia un lugar desconocido. Además la vacuna tan sólo serviría para enmascarar los síntomas pero no nos curaría. A veces hay que sufrir la fiebre y el deliro y dejar que la inmunidad natural siga su curso. Sólo así salimos de la epidemia más fuertes y renovados, más sanos. Será un vuelo sórdido, feo, cruel. A aquellos pajaritos que sólo busquen en los libros historias bonitas que les hagan soñar y echar a volar su imaginación, les recomiendo que se abstengan de emprender esta aventura. Los más valientes, los que opinen que en la literatura como en la vida debe haber de todo, y además de entretener y emocionarnos ha de servir para hacernos aprender y reflexionar, seguidme. Tal vez queméis parte de vuestro plumaje en el recorrido que a punto estamos de iniciar, pero os aseguro que nuestro periplo será fructífero.
Portada de La cena |
Una mesa, un restaurante de esos en los que hay que reservar con antelación o tirar de contactos, dos parejas cultas, 'exitosas', bien posicionadas. Este es el escenario de "La cena" de Herman Koch. Entrantes, primer plato, segundo plato y así hasta el postre. De esta manera distribuye Koch los capítulos de esta novela. A la vez que se suceden las viandas se irán intercalando también conversaciones banales, pero éstas sólo esconden el verdadero propósito de la reunión. La tensión corta el ambiente, diríamos si se tratase de una novela de suspense o terror, y aunque no sea el caso los temas tratados en "La cena" dan auténticos escalofríos.
El auténtico motivo por el que se citan los dos matrimonios es para 'afrontar' un suceso de violencia en el que están involucrados los hijos adolescentes de ambas parejas. No es la violencia el único asunto controvertido que trata el escritor holandés en su novela. Bajo los acontecimientos que se van desvelando en esa cena subyace la sobreprotección de los hijos, la exculpación y autoexculpación, la hipocresía y doble moral, la superioridad intelectual mal entendida. Podría haber elegido Herman Koch escribir un ensayo en lugar de una novela, pero considero que con esta última la reflexión sobre estos temas cobra una mayor dimensión. En esta historia nadie es lo que aparenta, y el autor sabe jugar muy bien sus cartas y hacernos partícipes de esta espiral de hipocresía en la que vive sumida la sociedad actual occidental. Nosotros lectores entramos al trapo y nos lanzamos a prejuzgar antes de conocer, y el que habla de lo que no sabe más tarde o más temprano acaba equivocándose.
Tan sólo mencionar un detalle que en mi opinión empaña un poco esta magnífica disertación que nos ofrece Koch. Observo una especie de 'justificación' de la violencia hacia el final de la novela aunque estoy segura de que para nada es la intención de su autor. Me gustaría explicar más esta cuestión pero no voy a incidir más en ella para no desvelar puntos clave que considero los futuros lectores han de descubrir ellos solos.
Esto es lo que os ofrezco esta semana, pajaritos, un retrato aberrante de esta sociedad enferma de la que todos formamos parte pero de la que también todos renegamos, una historia que os sorprenderá y repugnará a partes iguales. Aun así, recomiendo encarecidamente su lectura, para aunque sólo sea por un momento en nuestras vidas, aplicarnos a mirarnos en ese espejo en el que ninguno nos queremos ver.
Fotografía de Masternet82 |
Ficha del Libro:
Título: La cena
Autor: Herman Koch
Editorial: Salamandra
Año de publicación: 2010
Nº de páginas: 288
Más sobre "La cena" de Herman Koch
"La cena" ha sido galardonada con el Premio del público y escogida Libro del año 2009 en Holanda.
Si aun tenéis dudas sobre este libro y queréis leer sus primeras páginas, aquí os dejo el enlace por cortesía de su editorial.
Buceando por el ingente mar de internet me he enterado de que Cate Blanchett debuta en la dirección con la adaptación cinematográfica de esta novela. Lo que desconozco es si ya se ha inicado su rodaje. Si hay algún cinéfilo por ahí enteradillo, por favor que informe.
Curiosidades
He iniciado esta entrada comparando la lectura de esta novela con el padecimiento de una enfermedad, no en vano la trama gira en torno a una sociedad podrida. En determinado momento de la elaboración de esta reseña los circuitos neuronales de mi memoria han traído a mi mente a otro Koch de nombre Robert. Nacido en 1843, Robert Koch, médico alemán y Premio Nobel de Fisiología y Medicina en 1905, es conocido por el descubrimiento del bacilo de la tuberculosis y sus hallazgos sobre el cólera. Pero si por algo ha pasado a la Historia es por los llamados Postulados de Koch, que establecen las condiciones para que un organismo sea considerado causa de una enfermedad. Maravillosa coincidencia que todavía es más si os digo que el nombre completo del padre de la bacteriología moderna es Heinrich Hermann Robert Koch.
Y el próximo viernes... volaremos hacia el mundo paraleo que imaginan algunos niños y descubriremos que ese mundo es más real de lo que en un principio imaginamos. Ayudaremos Budo, amigo imaginario, a salvar a Max, su amigo real, en "Memorias de una amigo imaginario"
Este me lo apunto, si o si. Tiene una pinta estupenda, y después de leer tu reseña (estupenda, como siempre) me has convencido. ¡Otro más para la lista!.
ResponderEliminar¡¡Besos!!
Espero que te guste. Lo que sí tengo claro es que no te va a dejar indiferente.
EliminarGracias como siempre por tus palabras. Besos!!
Mi padre lo tiene en su estantería, cuándo tenga un poco de más tiempo me lo pillaré para leerlo, ya me dijo en su momento que estaba bastante bien <3
ResponderEliminarPues cuando tengas un hueco aprovecha que lo tienes a tu disposición. Espero que lo disfrutes. Besos.
EliminarComo me considero una lectora valiente me lanzaré a su lectura. Estupenda reseña. Y espero que disfrutes mucho de Memorias de un amigo imaginario, a mí me encantó. Saludos!
ResponderEliminarAsí me gustan las lectoras, valientes. En cuanto a "Memorias de un amigo imaginario" no me encantó, me enamoró.
EliminarGracias por pasarte, Cris. ¡Bienvenida!
Madre mía, me encantaría atreverme con este libro porque tiene pinta de ser de los que se quedan grabados, pero primero tendré que mentalizarme.
ResponderEliminarPD: te sigo, soy de la iniciativa blogs asociados <3
¡Ánimo! No te dejará indiferente, te lo prometo.
EliminarSaludos!!
No conocía este libro. Me lo apunto.
ResponderEliminarSoy de la iniciativa blogs asociados
Que lo disfrutes cuando lo leas.
EliminarUn saludo!!
wow se ve interesante!
ResponderEliminarPD : te sigo soy parte de blogs asociados :)
Te animo a leerlo, Mayte.
EliminarBesos :)
Parece que esta interesante, puede ser una buena elección, gracias por descubrirnos libros nuevos.
ResponderEliminarTemas interesantes y controvertidos los que trata esta novela, Nuria. Gracias a tí por pasarte y dejar tu comentario.
EliminarBesos!!!
¡Madre mía, Lorena, cinco años separan tu lectura de la mía! Y qué bien que está tu reseña. Yo acabo de leer la novela y estoy a un tris de hacer una reseña de ella. No sé si se puede decir más de lo que tú planteas. En cuanto al final, estoy contigo en que no creo que Koch justifique la violencia sino que pienso que prosigue hasta la última línea mostrando la manera hipócrita y egoísta de esta sociedad en la que sólo prima lo mío (y los hijos forman parte de ello) y por defenderlos todo sirve y nada es grave si lo hacen los míos y terrible si lo hacen los demás. Es la podredumbre moral en la que vivimos. Creo que Koch con este final no hace más que dejarnos inquietos, incómodos y poco satisfechos porque es inadmisible -diremos, comentaremos, pensaremos- que esto pueda quedarse así.
ResponderEliminarPues sí, madre mía, cinco años ya de esta lectura y esta reseña. Apenas dos meses llevaba el blog en funcionamiento. Me da cosilla releer estas entradas antiguas, mas como en este caso que no la había vuelto a revisar.
EliminarEl final de esta novela no me satisfizo del todo y es lo único que me empañó un poco una lectura que aún recuerdo como magnífica. Es una opinión personal que nunca desarrollo mucho por no 'spoilear' el libro a quienes no lo hayan leído.
Estoy segura de que tu reseña conseguirá hacerle justicia al libro. Estaré pendiente.
Besos
Pues aquí vengo sabiendo que seguro que Lorena se ha leído este libro. Y efectivamente, aquí lo encuentro, una reseña de hace unos poquitos de años. Este libro me lo regalaron y por ser breve esta semana decidí leerlo en mis trayectos al trabajo. No sé ni que decirte. He estado a punto de dejarlo. Me repugnaba lo que estaba leyendo. Esta semana que tanto se ha hablado de reescribir los libros voy yo y me leo este libro que no puede ser más contrario a lo politicamente correcto de nuestra época. Me ha repugnado, me ha dado asco, me han dado ganas de tirarlo por la ventana, pero desde luego que también me ha ayudado a reflexionar. Un abrazo
ResponderEliminarPues a mí me gustó mucho. Muestra la hipocresía social en todos los niveles: los políticos, dentro de la familia, del matrimonio, etc.
EliminarCreo que lo importante también de la lectura que has hecho es la reflexión que te ha suscitado. Ya sólo por eso hiciste más que bien no tirándolo por la ventana.
Un beso
Pues sí, has acertado, Esther, he leído este libro (jeje). Hace ya varios años, cierto; de hecho, es una de las primeras reseñas del blog. A pesar de que hace ya tiempo, y de que he olvidado, por tanto, muchas cosas de esta novela, guardo vigentes las impresiones que su lectura me provocó. Como para tantas cosas, pienso que en literatura también el mejor juez es el tiempo, y en este caso para mí esta novela de Herman Koch ha pasado el juicio sin problema. Sigue sin satisfacerme el final, pero, a excepción de eso, me parece un magnífico ejercicio no solo de reflexión sobre la sociedad sino de autoconocimiento del propio lector. Coincido con Juan Carlos en que, aunque solo sea por las reflexiones a las que esta lectura te habrá llevado, has hecho bien en no tirar el libro por la ventana. Pero sí que es una lectura incómoda. No es ningún secreto a estas alturas que me atraen las lecturas que nos incomoda. Supongo que eso sería lo que te llevó a pensar que podría ser probable que yo hubiera leído esta novela.
EliminarGracias por pasarte a comentar tus impresiones.
Un abrazo